jueves, 9 de marzo de 2017

Clarín 09/03/2017: "Ahora estoy más viejo y soy más salvaje"


Edición impresa en el día de hoy

Excelente nota de Martín Muti en la edición de Clarín de hoy.  Hodgson habla de su salida de Supertramp y de su carrera solista. Conmueve la mención a la enfermedad de Rick Davies.

 La voz de Supertramp, antes de sus shows en el Gran Rex, habla del éxito, las separaciones y los reencuentros.
 
En 1983, Roger Hodgson había perdido el placer de estar una de las bandas más exitosas del momento. No le alcanzaba que tan solo cuatro años antes, su "bebé", como se refiere a Supertramp, haya publicado el álbum más glorioso de su historia, con un repertorio de notables piezas musicales como fue Breakfast in America. Sin más, decidió partir. Sus letras, esas que buscaban trascendencia, valores morales y simpleza cotidana, que fueron temáticas recurrentes en su período inicial, habían desvanecido completamente de su proceso compositivo. "Había perdido la alegría, hasta mis habilidades para componer... Las grandes canciones ya no venían hacia mí, creía que había perdido la fuente de inspiración", cuenta Hodgson.
La presión de la industria musical también influyó en su decisión, que definitivamente, lo empujó para que salte al vacío artístico y se aparte de todo. Al mismo tiempo, esta renuncia a lo que en su momento lo hizo feliz, le permitió que pueda volver a recostarse en su lado espiritual, "algo que había perdido notablemente" en el agitado período de Supertramp, y que se dedique a criar a sus hijos.
Luego de editar dos discos en solitario, se pasó 15 años alejado de las giras y una década fuera de cualquier estudio de grabación. Pero el nuevo siglo y su experiencia, incitó para que Hogdson recupere esa paz consigo mismo y reflote su costado místico. "Hoy en día, hacer lo que hago, es totalmente curador para mí... siento que sobre el escenario estoy meditando", confiesa.
¿Por qué hoy en día te sentís mejor internamente que en la época de Supertramp?
Era muy tímido e inseguro. Definitivamente no me tenía demasiada confianza en muchos aspectos. Ahora estoy más viejo y soy más salvaje. Me siento mucho más cómodo conmigo mismo. Cuando dejé la banda me pasé 17 años sin girar y sentí esa diferencia. Sin dudas, ahora me conecto mejor con la gente.
¿Tan sofocado estabas de la industria musical?
Sí... a ver... sé que para un artista, de cualquier edad, el éxito es el desafío más grande y se te da vuelta la vida 360 grados. Para mí fue fabulosa esa época, pero a la vez muy dificultosa. Mi cabeza necesitaba un tiempo. Necesitaba alejarme de todo eso para volver a hallarme. Estar mucho tiempo mis hijos me ayudó muchísimo en eso... Tenía que alejarme de todo el mundo musical para volver a acercarme a mi lado espiritual y volver a darle importancia a ese aspecto mío, interno, que había dejado atrás.
Sin embargo se dice que le pediste varias veces a Rick Davies (la otra mitad compositiva de Supertramp) de volver a unirse.
No sé por qué se dice que fueron muchas porque fue una sola vez, precisamente en 1992. Rick y yo volvimos a tocar juntos, nos encerramos y estuvimos cerca de hacer algo, otra vez. Pero desafortunadamente hubo cosas en el medio que dejaron truncas esas posibilidades y la idea quedó estancada. Pero recuerdo que hicimos un gran demo en esa juntada de la canción You win I lose, el single que vino antes de presentar su disco Some Things Never Change.
En volver estaba el riesgo de que Supertramp no tenga el mismo espíritu de aquella época.
Absolutamente. Fueron muchas las razones por la cual dejé la banda, pero artísticamente ya no podía hacer lo que realmente quería a través del potente vehículo que era Supertramp. Tuve que dejarlo ir... Y creo que Rick piensa lo mismo. Lo quiero mucho. Pero a veces es difícil... Es como volver con tu ex esperando que la magia esté intacta. Hay veces que es mejor dejarlo así. ¿Volver atrás a eso que hice durante 15 años? ¿Para qué? Obviamente sólo por dinero. Y no necesito ni quiero eso. Lo que haga ahora, artísticamente, tiene que ser algo producto de mi corazón. Si no sale de ahí, en este momento, para mí no tiene ningún sentido.
¿Por qué querías volver si has compuesto los más grandes clásicos de Supertramp?
Mmm... todo el tema de Supertramp no se puede resumir en qué es lo que hice, qué escribí o qué merezco. Rick y su esposa lograron la marca de Supertramp, y yo no podía utilizarla. Capaz fue para mejor.
¿No te perjudicó haber perdido el nombre?
Bueno, fue como barajar y dar de nuevo. Fue como arrancar de casi de cero. Algunos sabían mi nombre, pero definitivamente fue un desafío poder construirlo por encima de una marca gigante, de muchos años, como es Supertramp.
¿Volviste a hablar con Rick luego de que se le diagnosticara cáncer?
Sí, claro. Tuvimos la mejor charla en mucho tiempo. En la vida, cuando pasan este tipo de cosas todos los problemas quedan atrás. Lo importante es que con Rick compartimos algo muy hermoso, una aventura mágica.
De acuerdo al canto y a las composiciones parece que vos fuiste el más sensible de los dos.
Puede ser... Mis canciones reflejan cómo soy. Todo lo que escribí derivó en lo que me pasaba internamente. Nunca escribí canciones para la audiencia, para la industria, sino que fueron muy personales. Rick escribió fabulosas canciones... puede ser que menos personales. No sé, es difícil catalogarlas. Puede ser que yo haya sido más sensible... Lo que sí te puedo decir es que yo no tuve miedo de ser vulnerable a través de mis canciones.
¿Cuando tuviste la seguridad suficiente para comenzar a ser Roger Hodgson artista?
Mirá... No tenía ninguna intención de dejar atrás un nombre con el cual invertí 14 años de mi vida. Supertramp es mi bebé, y es a la vez, parte de mi identidad. No tenía dimensión de lo que estaba haciendo, pero lo tuve que hacer. Pero como dice John Lennon: "la vida es eso que pasa mientras estás ocupado haciendo otros planes". No quería hacerlo, pero pasó y de repente yo estaba solo, muy confundido y varias veces me pregunté: '¿qué hago ahora?'. Porque estuve un tiempo bajo la sombra de Supertramp y nadie sabía quien era Roger Hodgson. Pero, al mismo tiempo, seguía amando la música y tenía a dos hijos que criar y el deber de darles la mejor infancia, adolescencia, que podía. Entonces, 15 años después, cuando volví a la música, descubrí que era aún más fuerte y más seguro de mí mismo.

Antes de la publicación de tu segundo disco solista ("Hai Hai", 1987) tuviste un brutal accidente doméstico, ¿es verdad que el médico te dijo que no volverías a tocar?
Exacto, fue lo primero que dijo. Cuando me caí, aterricé sobre mis muñecas, también lo hice con mi cabeza. Tenía algunas contusiones, por lo que exactamente no recuerdo que más me dijo. Pero esa frase no me la olvido. Me dije: "bueno, quizás esto es todo, nunca más podré tocar mi música".​
¿Mientras creaban Breakfast in America, pensaban que iba a ser un disco tan exitoso como lo fue?
Obviamente en esa época la radio era importante y sabía que teníamos 4 o 5 canciones que comercialmente podían funcionar muy bien. Lo que sí no sabía era que iba a ser tan grande como finalmente lo fue. Lo puedo percibir hoy en día en la gente cuando en el tour hago canciones de ese disco. Es increíble cómo se transforman. Me genera una sensación maravillosa ver tal cosa.
¿Y qué te genera "The logical song"?
Todas mis canciones son muy personales. Soy inglés, crecí en Inglaterra y esa canción refiere a mi niñez... Era muy feliz, la vida era simple, mágica y algo pasó y me mandaron a la escuela (risas), y ahí me enseñaron a ser 'sensible, responsable... logical, practical' (comienza a cantar la canción). Ahí perdí parte de mi alegría cotidiana y, luego, pasamos el resto de la vida tratando de recuperarla. Pienso que la vida es muy dura para algunas personas y esta canción trata de bajarlos a un lugar simple en donde se puedan preguntar '¿quién soy y cuál es el propósito de la vida?'. Para mí esas preguntas son muy importantes. Y cuantas más respuestas encuentres, más preguntas vas a formular. Es un círculo maravilloso. Toda mi música refleja parte de eso. Dreamer o Give a Little Bit, también, y ahí me inmiscuyo en el cuidado y la solidaridad de uno a otro.
Sus shows en el Gran Rex
En un intento de reafirmarse en la escena como Roger Hodgson luego de haber dejado en la música una marca indeleble con Supertramp, el sábado y domingo, en el Gran Rex, este músico y compositor, que está cerca de cumplir 67 años, cantará temas extraídos de su carrera como solista (integrada por tres álbumes de estudio), así también muchos de los éxitos que compuso con la banda inglesa como The logical song, Give a little bit, Take a long way home, y parte del disco que en 1979 lo catapultó hacia la fama absoluta.
¿Estás pensando en hacer un nuevo álbum? Tu último disco de estudio data del año 2000.
Posiblemente, pero estoy bastante ocupado en las giras y mi cabeza está puesta en brindar buenos conciertos. Ahora, esa es mi mayor satisfacción en vez de estar encerrado por meses haciendo un disco. Igualmente, estaré tocando un par de canciones nuevas en los shows de allá (esta entrevista se realizó, el jueves 2 de marzo) para que la gente se entere qué es lo que estoy haciendo. Porque tengo, al menos, 60 canciones nuevas.

viernes, 3 de marzo de 2017

¿Cuáles son algunas de las canciones que nunca tocó en nuestro país?



 


El set list de un concierto es algo complejo. Allí se demuestra la dinámica de la banda, la interacción entre los músicos y el manejo de los climas a lo largo del show. Hay poco lugar para la improvisación, incluso entre los bises.
Aunque los shows del 11 y 12 de marzo en el Gran Rex forman parte del “Breakfast In America Tour”, Hodgson también incluye canciones de discos anteriores y de su obra como solista.
¿Cuáles son las canciones que jamás incluyó en sus actuaciones en Argentina? Aquí están algunas:



“Rosie Had Everything Planned”
Esta hermosísima canción formaba parte de “Indelebly Stamped”, el segundo disco de Supertramp. Aunque Hodgson suele incluirla en el set list de sus giras, nunca la interpretó en nuestro país.

“Don’t you want to get high?”
Versión en vivo incluida en “Rites of Pasagge” el disco con el que retomó su carrera solista. No suele formar parte de su set list. 

“Babaji"
Una verdadera  gema de “Even in the Quietest Moments”, quinto disco de Supertramp. Aunque la tocaba con la banda, Hodgson no suele incluirla en sus shows como solista. Ojalá pudiésemos escucharla  aquí alguna vez.

“Crazy”
Quizá  la única de sus canciones de “Famous Last Words” que no interpreta en vivo. 

“You Make Me Love You”
El clip de la canción tuvo una alta rotación en los programas de video. La gira de este disco fue cancelada  cuando Hodgson se accidentó y quebró sus muñecas.

“Puppet Dance”
Aunque el hit de “Hai Hai “(el segundo disco solista de Hodgson) fue “You Make Me Love You”, “Puppet Dance”  tuvo muchísima difusión en las radios de nuestro país.
Estas dos canciones no forman parte de sus shows.




“Only Because Of You”
Sólo para volver a escucharla pues esta sí la tocó aquí. Gran composición con un alto impacto emocional  y un maravilloso coro de Claire Diament.
 
“Hungry”
Corte de difusión del magnífico álbum “Open The Door”, su última obra solista (hasta ahora).

La lista de canciones que quisiéramos escuchar sería interminable. Entre ellas las que aún no grabó ("Low Dance", "Hum Hum", o "Teach Me love Again", sólo por nombrar algunas). Falta muy poco para conocer el set list. Ojalá tengamos alguna sorpresa en el Gran Rex.





miércoles, 1 de marzo de 2017

Gran Rex, 11 y 12 de marzo de 2017. 5ª Visita de Roger Hodgson a Argentina.




  

El próximo 11 de marzo se producirá la quinta visita de Roger Hodgson a nuestro país. El show será en el teatro Gran Rex , un escenario donde ya fue ovacionado en sus actuaciones anteriores.
Debido a la demanda de entradas (ya agotadas para el primer show)  se agregó una nueva fecha para el domingo 12 de marzo.
A  quienes jamás presenciaron un concierto de Hodgson,  le recomendamos que no se pierdan la oportunidad. Escucharan a uno de los más grandes compositores Británicos, dueño de una voz legendaria.  Sus canciones alcanzaron impacto mundial, pasaron la prueba del tiempo, y se convirtieron en clásicos.
La banda que lo acompaña, Aaron Macdonald (saxos, instrumentos de viento); Kevin Adamson (teclados); David J. Carpenter (bajo) y Bryan Head (batería), suena precisa, ajustada, y ya lleva cientos de shows sobre sus hombros.  El sonido que logran es asombroso.
Para los amigos que  seguimos cada uno de los shows de Hodgson, es una oportunidad de reunirnos y celebrar (muchos viajarán cientos de kilómetros; otros, miles). Esperamos ver a muchos de ustedes  en el Gran Rex.